Celebrando el Día Internacional de la Mujer: la voz de nuestras profesionales

Hoy, 8 de marzo, se celebra el Día Internacional de la Mujer, reconocido por la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Este día se utiliza tradicionalmente para reivindicar el feminismo y denunciar el sexismo. Se conmemora la lucha de las mujeres por obtener igualdad de oportunidades en el mundo laboral junto a los hombres.

Para conmemorar el Día Internacional de la Mujer, hemos realizado cuatro preguntas a investigadoras de diversos perfiles del IGTP y profesionales de distintas áreas de apoyo a la investigación. El objetivo es conocer las dificultades que han enfrentado como mujeres en el campo profesional y entender sus perspectivas sobre el futuro.

Silvia Andrade, gestión contable y fiscal

1. ¿Has encontrado problemas en tus estudios y/o carrera profesional por el hecho de ser mujer? 

Terminé la carrera de Administración y Dirección de Empresas en el año 2008, muchas de mis compañeras eran chicas, no recuerdo sufrir discriminación de género durante los años de estudiante. No obstante, los referentes femeninos en el ámbito académico eran inexistentes, los profesores de la universidad eran hombres y los grandes economistas de la historia contemporánea también lo eran. Al comenzar mi carrera profesional fui consciente del techo de cristal y de las limitaciones que tendría solo por el hecho de ser mujer, el acceso a posiciones directivas y la maternidad son algunos ejemplos de las dificultades que me encontré.

2. ¿Qué crees que pueden hacer las instituciones científicas para lograr la igualdad?

Fomentar la igualdad en el nombramiento de cargos directivos. Actualmente, el liderazgo femenino en la gestión económica de los centros de investigación es alto en contraposición a los cargos de gerencia y dirección que aún están liderados mayoritariamente por hombres. En nuestra institución y en los últimos años, se está trabajando en el Plan de Igualdad de oportunidades, se ha elaborado el protocolo contra el acoso sexual y el día 8 de febrero se celebra el International Day of Women and Girls in Science, creo que el esfuerzo es positivo y se debe reconocer el trabajo del Comité de Igualdad del IGTP.

3. ¿Tienes esperanza de cara al futuro o consideras que la situación está estancada?

Sí, en términos generales soy optimista, aunque considero que la lucha por la igualdad y la educación sexual debe estar aún muy presente en nuestra sociedad, para lograr una igualdad real en el futuro. No obstante, si amplío la mirada al mundo, encuentro que queda mucho camino por recorrer, aún hay muchos países que vulneran los derechos fundamentales de las mujeres. Es por este motivo que creo que es tan importante el movimiento feminista y la celebración del 8M Internacional.

4. ¿Cuál es tu mensaje para las jóvenes que quieren adentrarse en el campo profesional?

Mi mensaje sería confianza en sí mismas, esfuerzo y valentía para romper todos los techos de cristal que encuentren en el camino. Afortunadamente ahora hay muchos referentes femeninos en los que poder inspirarse.

Sandra Fernández, gestora de proyectos internacionales

1. En mi caso, no he encontrado problemas para cursar mis estudios por ser mujer. Sin embargo, sí he encontrado algunos en mi carrera profesional, y aún más siendo madre. Aunque las situaciones y las entidades están cambiando, todavía es complicado llegar a una posición de liderazgo y mantenerla, siendo mujer y madre.

2. Como he mencionado anteriormente, aunque las situaciones y entidades están cambiando, todavía hay mucho camino por recorrer. En mi opinión, es necesario apoyar y acompañar a las mujeres en su desarrollo profesional, teniendo en cuenta tanto sus capacidades como sus necesidades. Además de tener las mismas condiciones laborales, sería necesario dar mucha más visibilidad a las mujeres.

3. Sinceramente, soy bastante optimista. Creo que el empoderamiento de las mujeres está cambiando la sociedad y su percepción. Hay que seguir luchando, seguir insistiendo para mejorar la situación y para hacernos más visibles, pero podemos constatar que estamos en una situación mejor que años atrás. La esperanza es que en el futuro, nuestra situación, la de las mujeres, mejore.

4. Mi mensaje principal para las jóvenes es que hagan lo que realmente les gusta. Si quieren, pueden. Que no se echen atrás, que sean valientes y que vayan a por todas. Esfuerzo, perseverancia, paciencia e ilusión.

Marcel·la Franquesa, líder de grupo emergente (Miguel Servet), coordinadora del grupo de investigación REMAR y investigadora principal del grupo de investigación IVECAT

1. No tuve problemas, pero sí una falta de referentes femeninos en posiciones de liderazgo. Cuando empecé parecía que liderazgo y maternidad eran incompatibles. Esta idea preconcebida ha ido cambiando pero aún penaliza en muchos ámbitos profesionales.

2. No lo sé, porque muchos de los aspectos que condicionan el acceso de las mujeres a algunas posiciones son fruto de unas construcciones sociales que son difíciles de cambiar. Estamos, sin embargo, viviendo unos años de cambios de actitud y de relevo de género al frente de algunas instituciones. La discriminación positiva es un concepto que no me convence aunque en algunos casos es necesario para romper algunas dinámicas muy arraigadas.

3. El cambio ya está presente y es palpable en muchos ámbitos y lo que hay que ver es si se estabilizará y seguirá avanzando o nos vendrán nuevos tiempos de retroceso. Actualmente la dinámica social y profesional es imparable pero hay que estar alerta con las olas reactivas y retrógradas.

4. Lo más importante es creer que no hay barreras asociadas al sexo/género. Muchas veces el enemigo que no nos permite avanzar lo tenemos integrado dentro de nosotras mismas, o así nos lo han hecho creer. Debemos estar convencidas y mostrar nuestro potencial, y para hacerlo no es necesario seguir los patrones masculinos, podemos generar nuestros propios caminos.

Carol Gálvez-Montón, gestora de las plataformas científicas del IGTP, subdirectora del grupo de investigación ICREC (Insuficiencia Cardíaca y REgeneración Cardíaca)

1. En términos generales, el hecho de ser mujer no ha condicionado mi investigación y carrera profesional. Cabe decir que he optado por no ser madre y dedicarme plenamente a mi carrera profesional y, por tanto, no sé qué hubiera respondido si hubiera sido madre. Pero si me fijo en mi entorno femenino es cierto que a medida que la carrera profesional avanza, mis compañeras han optado por puestos profesionales que implican menos liderazgo, a pesar de que todas hemos tenido las mismas oportunidades. Actualmente compaginar la maternidad con el liderazgo no es una opción de alta compatibilidad y a menudo la profesional se ve en una situación donde tiene que decidir hacia dónde inclinar la balanza. Aun así, también he visto casos cercanos de mujeres con tres hijos y alto poder de liderazgo y a menudo sus propios colegas las llaman SuperWoman, lo que describe muy gráficamente la situación actual.

2. Sinceramente creo que lograr la igualdad no solo debe recaer en las instituciones. Pienso que todavía hay mucho por trabajar dentro de la sociedad y, aún más, dentro de nuestros hogares. En la mayoría de los casos no hay maternidad/paternidad en partes iguales, muchas son las mujeres que ceden ante su pareja y lideran el rol maternal. Entre todas debemos cambiar esta situación. Pero en cuanto a las instituciones, sí podrían ayudar a las madres o padres, especialmente en los primeros años de vida de los niños, incorporando el servicio de guardería dentro de las instalaciones de la propia institución. Esto fortalecería el liderazgo de las mujeres y facilitaría un ambiente de comunidad científica mucho más colaborativo y comprensivo.

3. La esperanza nunca se pierde y creo que si miramos atrás la situación actual difiere mucho de hace veinte años. Al menos, el problema se ha publicado y se está trabajando para lograr la igualdad. Sin embargo, se necesitan más recursos para que sea una realidad y los cambios no sean solo fenotípicos, debemos llegar al genoma de la situación y modificarlo. Es una tarea de TOD@S.

4. Perseverancia, esfuerzo e ilusión! Pero este mensaje lo hago extensivo a todos los géneros. La carrera científica es complicada, con muchos obstáculos e inestabilidad, pero enriquecedora a nivel personal y muy satisfactoria cuando logras alguno de tus retos. A las mujeres les diría que no desfallezcan, que crean en sus sueños y se rodeen de buena gente para alcanzarlos. ¡Ellas son imprescindibles! Los comités de dirección las necesitan, necesitan su punto de vista y experiencia, sus virtudes y defectos. Una institución será tanto más eficaz cuanto más integradora sea.

Alicia Lacoma, CIBER Enfermedades Respiratorias, grupo de investigación Innovación en Infecciones Respiratorias y Diagnóstico de la Tuberculosis

1. La verdad es que no recuerdo haber tenido problemas mientras estudiaba en la universidad. De manera similar, durante mi carrera profesional tampoco he encontrado impedimentos por el hecho de ser mujer. Sin embargo, durante el embarazo y la maternidad a veces es complejo mantener la productividad científica y laboral.

2. Cada una de las instituciones científicas debería hacer una reflexión sobre cuál es la situación real de sus trabajadoras, cuáles son los obstáculos a los que se enfrentan y proponer acciones realistas para solucionarlo. En este sentido, en los últimos años muchas instituciones y organizaciones científicas a nivel autonómico, nacional e internacional han desarrollado planes de igualdad para asegurar la igualdad de oportunidades.

3. Tengo esperanza de cara al futuro, ¡y sí, soy optimista! Los cambios difícilmente son de un día para otro, por eso es necesario que las administraciones e instituciones planifiquen y prioricen las acciones de forma conjunta y realista, teniendo en cuenta el tiempo que se tarda en poder implantarlas. Cada vez hay más iniciativas para dar visibilidad a las mujeres científicas, crear referentes reales para las nuevas generaciones y promover el interés de las niñas y adolescentes en las carreras vinculadas a la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas (carreras STEM).

4. Si tienen interés por la investigación biomédica, les diría que adelante sin ninguna duda. Bajo mi punto de vista, se trata de un ámbito de la ciencia muy interesante, estimulante y apasionante. Gente de mi entorno, muchas veces me dicen "para ti cada día es diferente, participas en diversos proyectos, conoces a gente de otros países, viajas...". Y sí, esa faceta es cierta, pero igual que ocurre en otras profesiones también les diría que hay que ser constante, perseverante y muy trabajadora.

Cristina Vilaplana, jefa de la Unidad de Tuberculosis Experimental, Departamento de Microbiología

1. En los estudios no, pero durante mi carrera profesional sí. Tal vez no tanto problemas como situaciones y comentarios desagradables. Mis colegas hombres han sido en general muy correctos, pero a medida que he avanzado en mi carrera profesional me he encontrado con que se han dirigido a mi pre-doc hombre como si él fuera el IP y no yo, o me han dicho cosas como "¿Ya tendrás tiempo de ocuparte de la familia?", y por supuesto he tenido que soportar mucho mansplaining por parte de gente mucho menos preparada que yo.

2. Para empezar, aplicar compensaciones justas en tiempo por el gap que representan las bajas por maternidad en las evaluaciones y priorizaciones de proyectos, como manda Europa. También, por supuesto, asegurar que hombres y mujeres cobren igual en todas las categorías profesionales, algo que hoy en día todavía no sucede.

3. Estamos muy estancados, avanzamos demasiado lentamente, hay poco compromiso real, pero tengo esperanza porque estoy convencida de que todo lo que hacemos servirá algún día para algo, y que las que vengan después serán mucho mejores que nosotras.

4. Que se marquen un objetivo y les digan lo que les digan, les entre por un oído y les salga por el otro, que muchos tratarán de hacerles la zancadilla, de que no lleguen, y que es importante que no se desvíen. También que no les dé miedo decir que no, no quiero hacer esto, esto otro no me parece bien, etc. Y que si buscan pareja, se aseguren de que sea alguien que no quiera frenarlas.

Sabías que…

Cataluña se sitúa cuarta en Europa según el Índice de Igualdad de Género, una herramienta que permite medir el grado de igualdad entre mujeres y hombres en los 28 países de la Unión Europea con una metodología impulsada por el Instituto Europeo de Igualdad de Género (EIGE).

Con 76,5 puntos, Cataluña es la cuarta, por debajo de Suecia (82,2), los Países Bajos (77,9) y Dinamarca (77,8). Está por delante del conjunto de España (76,4), Bélgica (76) y Francia (75,7), entre otros, y se sitúa seis puntos por encima del promedio de los países de la Unión Europea, que es de 70,2 puntos. Cataluña ha subido este año cinco posiciones y 2,4 puntos, ya que el año anterior se encontraba en la novena posición con 74,1 puntos.

Los datos permiten evaluar el cumplimiento de los objetivos de igualdad y se basan en 31 indicadores distribuidos en seis dimensiones: trabajo, dinero, conocimiento, tiempo, poder y salud, elaborados por el Idescat y el Observatorio de la Igualdad de Género, adscrito al Instituto Catalán de las Mujeres, con datos del 2021, tal como establece el EIGE.

En Cataluña, el índice de igualdad de género es de 76,5 puntos sobre 100, más de seis por encima del promedio europeo y sube cinco posiciones. Ver nota de prensa.