Dos proyectos del IGTP reciben el apoyo de la Fundación ”la Caixa” para trasladar sus investigaciones punteras del laboratorio a los pacientes
El primer test de orina que detecta la fibrosis renal como alternativa a las biopsias renales, iniciativa del grupo IVECAT, y un proyecto que aplica inteligencia artificial para categorizar rápidamente a los pacientes con ictus y mejorar sus posibilidades de recuperación, del grupo de Investigación Neurovascular, son dos de los quince proyectos procedentes de centros de investigación catalanes seleccionados en el marco de la convocatoria 2023 del nuevo programa CaixaImpulse de Innovación en Salud.
El primer test de orina que detecta la fibrosis renal como alternativa a las biopsias renales, un proyecto del grupo de investigación en Innovación en Vesículas y Células para la Aplicación en Terapia (IVECAT) del Instituto de Investigación Germans Trias i Pujol (IGTP), y un proyecto que aplica inteligencia artificial para categorizar rápidamente los pacientes con ictus y mejorar sus posibilidades de recuperación, liderado desde el grupo de Investigación Neurovascular del IGTP, son dos de los quince seleccionados en el marco de la convocatoria 2023 del nuevo programa CaixaImpulse de Innovación en Salud. La Fundación "la Caixa" destinará 3,3 millones de euros a impulsar 29 proyectos biomédicos innovadores con capacidad para llegar al mercado y a la sociedad. Se trata de proyectos desarrollados en 20 centros de investigación, hospitales y universidades de España y Portugal.
Además de los dos proyectos del IGTP, en la convocatoria de este año se han seleccionado proyectos liderados por centros de investigación de Barcelona, Tarragona y Girona: Universitat de Girona (UdG), Centre de Regulació Genòmica (CRG); Vall d'Hebron Institut d'Oncologia (VHIO); Universitat de Barcelona (UB); Institut d'Investigació Sanitària Pere Virgili (IISPV); Institut de Ciència de Materials de Barcelona (ICMAB-CSIC); Vall d'Hebron Institut de Recerca (VHIR); Institut de Recerca Biomèdica (IRB Barcelona); Hospital del Mar Research Institute (IMIM) y Fundació Institut d'Investigació i Innovació Parc Taulí (I3PT).
Los premiados ―de entre más de 300 solicitudes recibidas― han sido evaluados por un panel de expertos y profesionales internacionales del ámbito de las ciencias de la vida y la salud.
Por área de negocio, en el caso de los proyectos liderados desde Cataluña, 7 de los 15 proyectos pertenecen al ámbito de terapias, 5 a diagnóstico, 2 a salud digital y 1 a dispositivos médicos. En cuanto a la financiación, los premiados reciben, dependiendo del grado de madurez del proyecto, entre 50.000 y 500.000 euros para desarrollarlo en los 2 años siguientes. En esta convocatoria, 7 proyectos catalanes han accedido a la fase 1 (hasta 50.000 euros); 6, a la fase 2 (hasta 150.000 euros), y 2, a la fase 3 (hasta 500.000 euros). El programa permite que, cuando los proyectos alcancen hitos específicos de desarrollo y tras una valoración por parte del comité de evaluación, puedan avanzar hacia fases posteriores con una financiación más alta.
Primer test de orina que detecta la fibrosis renal como alternativa a las biopsias renales
- Líder del proyecto: Francesc E. Borràs, colíder del grupo de investigación de Innovación en Vesículas y Células para la Aplicación en Terapia (IVECAT) del IGTP
- Subvención recibida: 300.000 euros (fase 3)
La enfermedad renal crónica afecta aproximadamente al 15 % de la población mundial y está muy asociada a factores de riesgo cardiovascular y patologías crónicas como la diabetes y la obesidad. Se trata de una patología que evoluciona silenciosamente hacia una disfunción e insuficiencia renal y que, en última instancia, requiere terapias de reemplazo de la función renal muy incapacitantes y que suponen un alto coste, como la diálisis y el trasplante. La principal responsable de la progresión de la enfermedad renal crónica es la acumulación gradual de matriz extracelular en los riñones, conocida como fibrosis renal.
Aunque se trata de una enfermedad que aún hoy no tiene cura, la prevención y la detección temprana pueden ayudar a retrasar, o incluso a detener, su progresión. Sin embargo, los parámetros analíticos actuales no reflejan las lesiones fibróticas, por lo que el sistema de diagnóstico estándar es la biopsia renal, un procedimiento invasivo con importantes limitaciones que impide un monitoreo óptimo del paciente.
El equipo del proyecto ha descubierto una correlación entre los niveles de vitronectina en la orina y el grado de fibrosis renal. Basándose en esta observación, están desarrollando un test para el diagnóstico y el monitoreo de la fibrosis renal a partir de muestras de orina, lo que supone una alternativa no invasiva que permite superar la mayoría de inconvenientes de las biopsias renales. Los investigadores desarrollarán dos versiones del test: una para la detección rápida que se pueda utilizar en centros de atención sanitaria, y otra destinada a los laboratorios clínicos, con la cual se conseguirá una evaluación más precisa de los niveles de vitronectina.
Inteligencia artificial para categorizar rápidamente a los pacientes con ictus y mejorar sus posibilidades de recuperación
- Líder del proyecto: Natalia Pérez de la Ossa, colíder del grupo de Investigación Neurovascular del IGTP
- Subvención recibida: 50.000 euros (fase 1)
El ictus es una enfermedad altamente prevalente que afecta a 15 millones de personas al año en todo el mundo. En el 40 % de los casos es causado por una oclusión en una de las grandes arterias del cerebro y puede tratarse de manera efectiva con terapia endovascular. Sin embargo, solo disponen de esta terapia algunos hospitales altamente especializados y con personal experimentado. Se estima que la mitad de los pacientes son transferidos inicialmente a centros no capacitados para llevar a cabo esta terapia, lo que puede conllevar retrasos sustanciales en el tratamiento, costos innecesarios de atención médica y peores resultados para los pacientes. Por otro lado, el 25 % de los ictus son de tipo hemorrágico y en estos casos es necesaria una atención lo más temprana posible en el hospital más cercano donde se puedan iniciar las medidas necesarias para reducir el sangrado.
En todos los casos de ictus, el tiempo de reacción es clave y las posibilidades de recuperación del tejido neuronal exigen una respuesta ágil y precisa en la caracterización y el tratamiento. La inteligencia artificial aplicada en el ámbito prehospitalario en la ambulancia puede ser una herramienta clave para identificar el tipo de ictus y el tratamiento que necesita cada paciente, y poder de esta manera tomar decisiones individualizadas que mejoren la gestión de los traslados que optimicen este proceso.
Las herramientas de evaluación de gravedad de ictus disponibles actualmente en el entorno prehospitalario, como la escala RACE, desarrollada previamente por el grupo de investigación e implementada mundialmente, se basan en escalas clínicas que gradúan la gravedad de los síntomas, pero tienen una capacidad diagnóstica limitada. El presente proyecto plantea el desarrollo de RACE-Plus, una nueva aplicación orientada al entorno prehospitalario (ambulancias) que permitirá predecir mediante algoritmos de inteligencia artificial el tipo de ictus que presenta un paciente para dirigirlo directamente al centro sanitario que le garantice una mejor recuperación clínica. Los investigadores estiman que la categorización correcta de los pacientes y su consecuente traslado al hospital correcto podrían hacer aumentar hasta un 20 % el acceso a la terapia endovascular y adelantar el tratamiento en 2 horas, lo que supondría un incremento del 10 % en las probabilidades de recuperación.