¿Proteína o ARNm? ¿Cuál es el futuro del diagnóstico de la tuberculosis?
El grupo de investigación de Innovación en Infecciones Respiratorias y Diagnóstico de la Tuberculosis ha probado una nueva técnica diagnóstica desarrollada en Dinamarca. La técnica ha cumplido con los estándares similares a los tests que se están utilizando actualmente. El objetivo de los investigadores es desarrollar una herramienta que permita mejorar la detección de los casos latentes de tuberculosis.
La tuberculosis (TB) la causa la bacteria Mycobacterium tuberculosis. Una de las principales características de esta bacteria es que puede mantenerse escondida sin llegar a causar la enfermedad (infección latente). Las personas con infecciones latentes pueden llegar a desarrollar TB activa más adelante; se calcula que un cuarto de la población mundial está infectada de forma latente. Este hecho, junto con el crecimiento de la resistencia a los antibióticos, hace complicado cumplir con el objetivo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de eliminar la Tb en 2035, según se incluyó en los Millenium Development Goals de las Naciones Unidas en 2016. En este sentido, la OMS está cambiando las políticas y centrándose más en el tratamiento preventivo de infecciones latentes mientras que se potencia la innovación en el diagnóstico, vacunas y tratamientos. Para todo ello es imprescindible ser capaces de detectar de forma fiable los casos latentes.
El grupo que lidera el Dr. José Domínguez ha participado en un estudio para poner a prueba una nueva técnica para detectar las infecciones de TB latente. La técnica la ha desarrollado el grupo del científico Morten Ruhwald, en el Centro de Investigación en Vacunas del Statens Serum Institut en Copenhague, Dinamarca. Este nuevo test detecta RNAm IP-10 utilizando PCR, una tecnología común en la mayoría de laboratorios de TB. La IP-10 ha sido testada anteriormente, como proteína, y ha dado resultados prometedores. Pero el RNAm se produce previo a la proteína, por lo que este test podría ser una herramienta de diagnóstico más rápido. El ensayo se ha llevado a cabo en 89 pacientes de TB y 99 controles sanos. La Dra. Raquel Villar-Hernández, del grupo del IGTP, ha coordinado el reclutamiento y la toma de muestras de pacientes a 5 centros del área de Barcelona.
El test más extendido, la actual prueba de la tuberculina (tuberculin skin test, TST) puede dar falsos positivos en personas que hayan recibido la vacuna BCG. El segundo test más habitual, el llamado IGRA test, estudia la respuesta inmunitaria del cuerpo a la infección. Ambos son menos eficientes en grupos específicos, como en niños o personas inmunosuprimidas que reciben corticoesteroides u otros tratamientos, o aquellos que tienen VIH.
"El ensayo nos ha permitido constatar que el nuevo método desarrollado por el grupo de Copenhagen tiene buena respuesta en pacientes y, en el estudio, hemos podido identificar perfeccionamientos que potencialmente lo mejorarán aún más", explica Villar-Hernández. "También hay indicios que su sensibilidad se podría utilizar para predecir el riesgo de desarrollar la enfermedad, que es muy necesario", añade.
"Las políticas de salud pública entorno la TB ya no se centran solo en los tratamientos, sino también en conseguir nuevas formas de identificar la población infectada, especialmente las infecciones latentes, que sean mejores, más rápidas, más fáciles y más económicas", valora Domínguez. "Nuestro grupo está trabajando en distintos consorcios internacionales centrados en nuevas técnicas diagnósticas que se puedan llevar a cabo fácilmente y funcionen para todos, para conseguir el objetivo", concluye.
J Clin Microbiol. 2020 Sep 22;58(10):e00848-20. doi: 10.1128/JCM.00848-20. Print 2020 Sep 22. Diagnostic Accuracy of Interferon Gamma-Induced Protein 10 mRNA Release Assay for Tuberculosis. Blauenfeldt et al, PMID: 32719030, PMCID: PMC7512164 (available on 2021-03-22), DOI: 10.1128/JCM.00848-20